Este sistema ofrece evidentes ventajas tanto en la vertiente presencial como en la online, permitiendo a los ciudadanos tener en un único lugar todas las credenciales que precisan para la verificación de su identidad, o acreditarse ante la administración para la recepción de servicios públicos. Además, posibilita la realización de trámites de manera mucho más cómoda y rápida, al tiempo que le da al usuario la oportunidad de compartir únicamente la información imprescindible.
La identificación personal es un aspecto medular en nuestras sociedades, y por eso documentos como el DNI, el carné de conducir o las tarjetas sanitarias son credenciales que hemos de presentar para hacer trámites con la administración, realizar operaciones económicas, poder conducir o acceder a servicios sanitarios.
La irrupción de Internet y el proceso de transformación digital subsiguiente han repercutido desde en la manera de relacionarlos con la burocracia de la administración pública, hasta en la naturaleza de las transacciones comerciales, impulsando la adopción de procedimientos de identificación acordes con las nuevas realidades como el DNI electrónico o el certificado digital.
Sin embargo, en el horizonte más inmediato emergen soluciones de identificación digital mucho más operativas como el ID Wallet, que permite al ciudadano tener en un único dispositivo tipo smartphone todas sus credenciales de identidad.
Un sistema ideal para la identificación que también protege los datos del ciudadano.
Con ello, se simplifica mucho acreditar quiénes somos, tanto online como presencialmente, y acceder a los servicios públicos que necesitamos, sin que por ejemplo resulte necesario introducir constantemente en formularios web los dígitos del DNI o de la tarjeta sanitaria.
Además, los ID Wallets no solo son mucho más cómodos y prácticos, sino que también ofrecen a los ciudadanos un mejor control de sus propios datos, para decidir qué información comparten, con quién lo hacen y cuándo.
Además, los ID Wallets no solo son mucho más cómodos y prácticos, sino que también ofrecen a los ciudadanos un mejor control de sus propios datos, para decidir qué información comparten, con quién lo hacen y cuándo.
Para los entes administrativos se simplifican procesos, desde la propia emisión de estos documentos acreditativos, que en la actualidad comportan la dedicación de recursos humanos que podrían ser destinados a otras actividades de índole menos burocrática. A este respecto, solo hay que pensar en la cantidad de funcionarios que han de trabajar permanentemente, por ejemplo, en las oficinas encargadas de expedir y renovar los DNI.
Igualmente, los sistemas de identificación digital por ID Wallet facilitan las verificaciones de autenticidad, y por tanto son una fantástica herramienta de la justicia, cuerpos de seguridad y policiales para la lucha contra el fraude.
Así, se trata de un método mucho más seguro, eficiente y ahorrativo, que ofrece muchas ventajas para los ciudadanos pero también para la propia administración, que gracias a este instrumento puede optimizar el control de identidad con la vista puesta en la seguridad ciudadana, o agilizar la prestación de servicios sanitarios, por citar solo dos de las aplicaciones más evidentes.
Proyectos de implantación de ID Wallets.
Por ello, en países como Alemania o en estados norteamericanos como Georgia o Arizona ya se están ensayando aplicaciones ID Wallet para los permisos de conducir, que cabe recordar que en Estados Unidos tienen valor identificativo, ya que no existe un documento como el DNI. Mientras que entidades como Market Insights auguran en sus informes una implementación a escala global de sistemas de identificación digital unificados que compendien identidad, tarjeta sanitaria y licencia de conducción.
De hecho, un documento tan importante actualmente como el certificado digital Covid ya se puede presentar actualmente en formato Wallet en el móvil con plena validez a efectos acreditativos, que todavía no se ha trasladado a otras credenciales como el DNI o el permiso de conducir.
Ventajas de los sistemas ID Wallet para los ciudadanos y para la administración.
La agilización administrativa que implican los sistemas ID Wallet tiene repercusiones a múltiples niveles, facilitando desde la apertura de cuentas bancarias hasta la creación de empresas online, sobre la base de una prueba de identidad fiable, rápida y sencilla.
Asimismo, estos sistemas conjugan los requisitos de transparencia y confidencialidad que veíamos cuando abordábamos las potencialidades de la unión entre las tecnologías Blockchain y ZKP, ya que los ID Wallet permiten dar a conocer únicamente la información exacta que se pueda precisar para un procedimiento concreto, manteniendo la privacidad del resto de datos. Por ejemplo, para participar en una votación puede notificarse un solo atributo de identificación compartido, como la edad.
De igual modo, también pueden ser una barrera eficaz para que menores no accedan a actividades no permitidas, como los juegos de azar. Por no hablar de todo lo que supone en comodidad para los los ciudadanos poder autenticarse automáticamente 24/7 para conocer los resultados de pruebas médicas, presentar impuestos o pagar sus multas.
Una comunicación de la administración con el ciudadano más personalizada y directa.
Igualmente, se establece un canal de comunicación seguro, rápido y ágil entre la administración y el ciudadano, que podrá recibir por esta vía notificaciones, avisos, recordatorios, etc.
De esta manera, se redimensiona la interacción gobierno-ciudadano, propiciando que esta sea mucho más directa y personalizada.
También, se incrementan mucho las barreras contra estafas basadas en la suplantación de identidad, o se evitan los inconvenientes de tener que anular y reemplazar todos los documentos acreditativos cuando se extravía la documentación personal.
Algo que no ocurrirá aunque se pierda el móvil, ya que todas las credenciales digitales se guardan en aplicación no en el dispositivo, por lo que se pueden volver a descargar sencillamente desde otro nuevo terminal.
Aún resta cierto camino por recorrer para garantizar una mayor robustez de estos sistemas frente a las ciberamenazas, un aspecto que por ejemplo ha ralentizado la implantación del ID Wallet del carné de conducir en Alemania; pero no cabe duda de que ya han emergido como unas valiosas herramientas que simplifican, agilizan y hacen más seguros y eficientes los procedimientos de identificación sobre los que se sustentan las relaciones de los ciudadanos con la administración.